No los provoquéis a ira ~ Lo opuesto a provocar es animar. ¿Qué estás haciendo con tus hijos? Solo tú lo sabes y tienes una oportunidad nueva en este día. Arrímate al Señor, busca de Él. Criadlos es sustentarlos ~ Compartiendo amor y ánimo en el Señor. Demostrándoles amor, es compartir emocionalmente y espiritualmente con ellos. Disciplinarlos ~ Es corregirlos, pero es instrucción o entrenamiento para ser discípulos de Jesús. Amonestarlos ~ Es instruirlos y animarlos a seguir al Señor. Es ser y demostrarles qué es ser entregados al Señor y caminar con Él. Todo esto es para poder tener armonía en el hogar.
Propósito de la Escritura: Pablo deseaba que todos los que anhelaban una madurez a semejanza de Cristo recibieran este escrito. El libro de Efesios describe la disciplina necesaria para convertirse en verdaderos hijos de Dios.