Jesús es nuestro ejemplo. Él no vino a ser servido, pero a servir. Nuestra vida en Cristo Jesús es para servir a otros, servir a la iglesia. Jesús aceptó a los judíos tanto como a los gentiles. Jesús murió en la cruz para traernos juntos, tener unidad como cristianos, perdonarnos de nuestros pecados para formar un cuerpo, que es la Iglesia.
El “evangelio es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego. Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.“